Aprovecha al máximo la vida útil de una herramienta
Los talleres exitosos siempre buscan formas de diferenciarse e innovar para obtener una ventaja competitiva. Aprovechar toda la vida útil de una herramienta con un sistema avanzado de gestión de herramientas (TMS) es quizás la manera más efectiva de hacerlo en este momento.
Acompáñame un minuto. Piensa en el recorrido de un solo componente de herramienta en un taller como si fuera una vida: nace cuando se ordena al proveedor y llega al almacén de herramientas; crece en el contenedor y encuentra su pareja perfecta al ser ensamblado; realiza un buen trabajo en la operación, cortando metal, y eventualmente se retira al atardecer, es decir, al contenedor de desecho.
Descanse en paz, herramienta. Viviste una buena vida.
Dejando las bromas a un lado, ¿te has fijado en cuánto del recorrido de la herramienta en el taller se dedica realmente a cortar metal? Como en la vida, la carrera profesional es solo uno de muchos factores para una vida feliz. En este caso, el tiempo real que la herramienta corta representa solo una fracción de su impacto en el taller. La adquisición, la gestión de inventario, el ensamblaje, el traslado por el piso, el desgaste y la distribución de un componente de herramienta, todo ocurre con cierta eficiencia – o ineficiencia – y tiene un valor. Los talleres saben cuánto de su presupuesto de compras se destina a herramientas, pero pocos saben cuánto valor se gana o se pierde mientras está en el taller. Aquí es donde entran los sistemas de gestión de herramientas (TMS). Cada empresa tiene algún tipo de TMS, ya sea las anotaciones del encargado del almacén de herramientas en una hoja de Excel impresa o el seguimiento inalámbrico de los componentes mientras se mueven por el taller, gestionando automáticamente el inventario según su uso.
Según mi experiencia, el método de anotaciones es mucho más común hoy en día. Pero las cosas están cambiando. El auge de la Fabricación Inteligente está mostrando los inmensos ahorros disponibles, mientras que un piso de producción más conectado los hace más accesibles. Esto dibuja una distinción clara entre un TMS reactivo basado en anotaciones y un TMS proactivo con hipertrazabilidad. El riesgo de un sistema reactivo es descubrir el valor del recorrido de la herramienta de la manera difícil.
Considera los siguientes escenarios. Una tarea pasa de ingeniería y planificación al almacén de herramientas. Descubren que no tienen un cierto inserto o solo tienen la cantidad suficiente para comenzar, pero no para terminar, y el stock permanece hasta que llegue el inserto. Ese es tiempo de husillo desperdiciado, quizás retraso en la entrega, incluso sueldos, debido a un inserto que cuesta solo unos cuantos dólares. La otra cara de la moneda es pedir más cortadores solo porque el contenedor parece vacío y no tener un trabajo en proceso que los necesite. Eso es dinero quemándose en los estantes de herramientas.
Si tienes un sistema de medición de herramientas offline, ya has dado los primeros pasos hacia una gestión de herramientas más eficiente. Claro, los ajustadores de herramientas reducen el tiempo de preparación y los costos de herramientas al eliminar errores y añadir precisión, pero ahora también pueden actuar como un centro de comunicación en el taller. Nuestros clientes más sofisticados, y francamente los más exitosos de manera consistente, utilizan ajustadores Speroni equipados con software que se comunica con el software CAM del ingeniero para verificar longitud, diámetro, crear un G-Code y postprocesar con los valores exactos de las herramientas. Este tipo de configuración apenas está rascando la superficie. Y aunque no lo creas, los proveedores han trabajado durante décadas para llevarnos hasta donde estamos. Nuestro socio italiano, Speroni, comenzó a trabajar con la fabricación automotriz de Fiat hace más de 30 años, conectando los almacenes de herramientas con el resto de la planta de producción.
Hoy en día, la mayoría de las soluciones están optimizadas para la gestión, a menudo sin mucha flexibilidad para adaptarse a lo que ocurre en el piso o a lo que pueda pasar allí el próximo año. Habiendo hecho nuestro nombre en herramientas – hasta lo más profundo de una operación de metalurgia – hemos trabajado con Speroni para aplicar una filosofía diferente de conectividad y trazabilidad a nuestros clientes en Norteamérica. Nuestra solución, Intelligo, se centra en donde todo ocurre: el taller. Sus procesos se alimentan utilizando dispositivos que reconocen componentes, filos de corte, ensamblajes de herramientas, carros, cestas, etc., a través de sistemas inalámbricos (por ejemplo, RFID o códigos QR/barra) mientras se desplazan por el taller.
El software SPERONI INTELLIGO Tool Management Solution permite organizar de manera integral tus ensamblajes de herramientas, tus componentes individuales, además de tus trabajos y kits de herramientas en una base de datos central de conocimiento evitando datos redundantes. Usando una estructura de software escalable y estaciones de trabajo locales, Intelligo vincula toda la biblioteca de herramientas de una empresa, activa o inactiva, con el software CAM, de planificación y de medición, y lo muestra en una interfaz gráfica 3D para referencia visual en tiempo real. La visibilidad y el seguimiento de la actividad del piso permite a un taller gestionar de manera proactiva el inventario de consumibles, el consumo y el ensamblaje, evitando tiempos muertos y mejorando la rentabilidad.
Puedes monitorear cómo se desgastan las herramientas en ciertos trabajos y ajustarlas. O, si máquinas duplicadas entregan diferente productividad en el mismo trabajo, puedes identificar fácilmente las herramientas exactas utilizadas y descubrir qué causa la discrepancia, diagnosticando problemas de máquina o husillo. Incluso es posible determinar el consumo de una máquina en términos de componentes desechados siguiendo un proceso de producción particular. Sin mencionar la oportunidad que ofrece el seguimiento y los datos desde el piso para optimizar reafilados, control de calidad, materia prima, fijaciones, e incluso el contenedor de desechos, ya que es un centro de ganancias. Este nivel de TMS puede parecer muy distante de cómo operan la mayoría de los fabricantes hoy, pero para muchos no está fuera de alcance. La instalación es práctica y cooperativa, y la mayoría de los talleres tienen la infraestructura fundamental para soportarla.
Este tren no se detiene. La tecnología está aquí, disponible y rápidamente haciendo obsoletas excusas como “cuesta dinero y no produce piezas” o “siempre lo hemos hecho así”. La conectividad del taller y de los procesos es la dirección hacia la que se dirige la metalurgia y creo que un enfoque desde el piso hacia arriba es el mejor enfoque.
Ahora es el momento más rentable para subirse a bordo, antes que los demás. Los talleres exitosos siempre buscan formas de diferenciarse e innovar, y aprovechar toda la vida útil de una herramienta con TMS avanzado es quizás la manera más efectiva de hacerlo ahora.
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